Religiosa genera controversia al desafiar dogma histórico sobre la virginidad perpetua de María.

La monja dominica Lucía Caram ha provocado una tormenta mediática y eclesiástica tras sus declaraciones en el programa Chester in Love, donde afirmó que María, madre de Jesús, tuvo otros hijos con José. Caram describió su relación como la de una pareja “normal”, sugiriendo que vivieron una intimidad matrimonial como cualquier otro matrimonio.

Estas palabras desataron una inmediata oleada de críticas, especialmente dentro del ámbito católico, donde el dogma de la virginidad perpetua de María —antes, durante y después del nacimiento de Cristo— es considerado una enseñanza inquebrantable desde los primeros siglos del cristianismo. El obispo de Vic no tardó en emitir un comunicado oficial reafirmando este dogma, ratificado por concilios históricos como el de Constantinopla (553 d.C.).

Desde la perspectiva cristiana evangélica, las Escrituras sí mencionan que Jesús tuvo hermanos y hermanas (Mateo 13:55-56; Marcos 6:3), lo que muchos interpretan como evidencia clara de que María tuvo más hijos después de Jesús. No obstante, la afirmación de una monja dentro de la Iglesia Católica ha sido vista como una ruptura con las doctrinas tradicionales que dicha iglesia defiende con firmeza.

Este incidente ha vuelto a poner en el centro del debate la tensión entre tradición religiosa e interpretación bíblica, y la necesidad de volver a las Escrituras como única fuente de verdad y autoridad sobre temas de fe.