El vocalista del reconocido grupo música cristiana “Tercer Cielo” ha sido criticado en las redes sociales al admitir que “le gusta las canciones de Bad Bunny”.
A través de su cuenta oficial de Instagram el cantante Juan Carlos del reconocido dúo admitió que le gustaba escuchar canciones seculares, y en especial una de Bad Bunny.
Juan Carlos, el cantante, confesó que al escuchar Bad Bunny se sentía contento, y guarda sus canciones en una playlist como “temas favoritos”, sin embargo, un creyente reconocido de esa área donde se encontraba decidió objetarle el que estuviera consumiendo este tipo de música que no edifica ni glorifica a Dios.
“¿Como tú escucha eso?’ Me dijo. ‘Facil, le dije. Yo subo el volumen y ya´ le respondí. ‘Es una buena canción. Me encanta el sonido y la producción. Es sólo entretenimiento, no veo en qué me afecta´, le dije. ‘Pero esos artistas no son cristianos’ me aclaró, luego sacó un costal de versículos y de toda clase de acusaciones del porque según él yo estaba mal”, relató él mediante una serie de imágenes publicadas en la cuenta de Instagram de Tercer Cielo.
Y continuo diciendo que luego de unos días caminaba cerca de la casa del hombre que lo criticó y lo encontró viendo series “para adultos”, y que luego de sentarse junto a él un rato le hizo la misma pregunta que le objetó a éste por escuchar música mundana.
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“Ahí lo agarré y le pregunté lo mismo que él me preguntó. A él se le había olvidado como me apedreó, así que yo aproveché para conservar”, juzgó el artista.
El artista cristiano decidió compartir esta experiencia para declarar que “vive libre de tabúes y bullying cristiano”, ya que ama la música de Nicky Jam y la de Marcos Witt, “Cuando me pongo a orar escucho música de alabanza pero también me gusta la salsa de Héctor Lavoe y Marc Anthony”, declaró.
“Yo no me dejo acabar por nadie ya que vivo feliz con la libertad que Dios me dio y la madurez que he adquirido en mi vida. Yo disfruto el buen arte en general… De eso se trata la vida, de no irse al extremo de nada. De todas formas es a Dios que le voy a rendir cuentas y no a la gente”, concluyó.